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Margena de la O

 

José Luis Abarca Velázquez, carrera política forjada en la ilegalidad. [Foto: José Luis de la Cruz]

 

 

 

No conformes con llevar a José Luis Abarca Velázquez a la presidencia municipal de Iguala, el PRD y Los Chuchos allanaban el camino para que su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, heredara el cargo.

Estado de Morelos, septiembre de 2009. En un canal de aguas pluviales de la carretera federal México-Cuernavaca, aparece el cadáver de Mario Pineda Villa, miembro del cartel de Arturo Beltrán Leyva, maniatado y amordazado sobre una lona con un mensaje.

Estado de Morelos, diciembre de 2009. La Marina mata a Arturo Beltrán Leyva en un operativo en Cuernavaca en el que también muere uno de sus operadores, Alberto (o Antonio) Pineda Villa, alias El Borrado.

Mario y Alberto son hermanos, y son hermanos también de la esposa del alcalde de Iguala. A un tercer hermano de María de los Ángeles, lo detienen por esas fechas en Tamaulipas. Estuvo preso en Matamoros. Salió libre.

El 25 de noviembre de 2013, organizaciones sociales en la ciudad de México revelaron la declaración ante notario público del activista social Nicolás Mendoza Villa, uno de los cuatro sobrevivientes de Unidad Popular (UP), en la que señala al presidente municipal de Iguala de asesinar a Arturo Hernández Cardona. “Le disparó en la cara, el cuerpo; antes ordenó a quienes los tenían encerrados que les torturaran”. A Hernández Cardona lo levantaron el 30 de mayo de 2013, junto con seis dirigentes sociales más de UP, después de una protesta en la caseta de Paso Morelos en contra del presidente municipal. Cuatro escaparon de sus plagiarios; se salvaron de morir.

Esos antecedentes nunca antes pesaron en el PRD. La presidenta del DIF en Iguala se convirtió, violando con permiso algunos estatutos, en consejera estatal del partido en la elección interna del 7 de septiembre pasado. Las corrientes Izquierda Progresista Guerrerense (IPG) y Nueva Izquierda (NI), la primera del gobernador Ángel Aguirre Rivero y la segunda de Los Chuchos, ganaron el mayor número de consejeros municipales y estatales en Guerrero. Preparaba el camino para la alcaldía.

El 26 de septiembre, por la noche, día del estallido de violencia en Iguala que terminó con seis muertos, 24 heridos y 43 normalistas desparecidos, la presidenta del DIF dio su segundo informe del cargo honorífico en plaza de Las Tres Garantías, con olor a campaña electoral. Por toda la ciudad colgaban pendones con su fotografía y nombre: “Presidenta (del DIF, en letras chiquitas) municipal”.

En 2012, el alcalde de Iguala afianzó su candidatura a presidente municipal en la corriente NI, sin afiliarse al PRD. Apenas en julio pasado formalizó su pertenencia al partido en una campaña de irregularidades exhibidas en los medios locales del municipio, por ejemplo, el módulo de afiliación y registro arrancó en lo que fue la casa de campaña del edil, ubicada en avenida Bandera Nacional, con las empleadas del DIF municipal capturando datos en horas hábiles. En esa misma campaña se afilió presidenta del DIF.

Para la elección, el PRD redujo la brecha y los seis meses reglamentarios de afiliación para aspirar a un cargo interno sólo aplicó a escala nacional. Ángeles tiene voz y voto en el máximo órgano del PRD en Guerrero: Consejo Estatal.

En la lista oficial de los 150 consejeros estatales aparece en la posición 30, representando un espacio de la bina NI/Coduc. Significa que aun en su condición de prófuga por la autoría intelectual que comparte con su esposo por el ataque, asesinato y desaparición de normalistas, mantiene sus funciones en el partido. Renunciar a ellas implica que presente renuncia firmada y credencial de elector.

De no hacerlo, NI, en estas condiciones, perdió un voto en las decisiones electorales para 2015. Cada espacio en la integración de planilla resulta ser parte de una estrategia de grupo, el preámbulo de coartadas electorales.

Abarca Velázquez se convirtió en alcalde de Iguala el 30 de septiembre de 2012 sin más tablas políticas que apoyar campañas pasadas de otros políticos y tener dinero.

Los empresarios joyeros en Iguala, por ser la ciudad del oro y su historia de orfebrería con ese metal, cobran cierta relevancia pública. Abarca Velázquez la tenía y la reforzó en 2008 cuando abrió la Plaza Tamarindos, de la que es dueño junto con su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa.

En Iguala es público que a Abarca Velázquez lo respaldó Lázaro Mazón Alonso, actual secretario de Salud. Compartían una amistad añeja, aparecen juntos en varias fotografías de momentos de campaña de uno y otro.

Mazón Alonso tiene su bastión político en ese municipio de la zona Norte. Fundó el PRD en Iguala, fue dos veces alcalde –el primero de oposición en 1996– y una vez senador de la República. Son su carta poder en las decisiones de partido.

Actualmente el funcionario del gobierno de Ángel Aguirre Rivero, originario de Cocula, pero avecindado en Iguala desde su niñez, se deslinda con sutileza del PRD y se acerca al Movimiento Regeneración Nacional (Morena), cuyo dirigente, Andrés Manuel López Obrador, lo promueve para la elección próxima en Guerrero.

A la puerta de su casa en Iguala, la mañana del 5 de octubre, el secretario comenta sobre su relación con Abarca: “Aquí en Iguala, a veces me hacen ser lo que no soy. Siempre dicen que si Lázaro lo apoya, gana, y si Lázaro no lo apoya, no gana. Y yo solamente voy y voto”. Su hermano Luis Mazón Alonso es el suplente del actual alcalde con licencia de Iguala. Y su hermana Fabiola, secretaria de Desarrollo Social del municipio.

Lázaro acepta que respaldó a José Luis Abarca. “Yo sí lo apoyé, sí lo apoyé y mucho. Ésta fue su casa de campaña, prácticamente”. Trabajador, con historia de familia comerciante y 30 años orero –término que le asignan en la ciudad a los vendedores de oro–, son las cualidades que, dijo, observó en él para apoyarlo

Lo reconoce como amigo. “Él es amigo mío, yo no voy a negar una amistad, de ninguna manera. Su esposa es amiga de nosotros, toda su familia es amiga de mi familia; su mamá, que en paz descanse, era amiga de mi mamá”. Después trata de matizar: “Él se lanzó solito; después lo apoyamos nosotros”.

Mazón Alonso se movió en el PRD desde Nueva Izquierda, la misma corriente que mantiene la dirigencia nacional desde los últimos tres periodos.

El 7 de octubre viajó a Iguala con el resto de la plana mayor del partido y pidió perdón a los habitantes por la barbarie cometida desde un gobierno perredista, de un militante de NI. “Asumimos nuestro error y ofrecemos al pueblo de Guerrero nuestras disculpas y pedimos su perdón”, dijo en sesión plenaria del CEN del PRD, en el Museo a la Bandera y Santuario a la Patria.

La justificación que ofreció por la tardía intervención del PRD, desconocimiento. “Toda la historia de horror la acabamos de conocer recientemente”.

La desaparición y asesinato de Arturo Hernández Cardona, también perredista, miembro de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN), la publicaron varios medios de comunicación nacionales en mayo y junio de 2013. Volvió a tener impacto mediático seis meses después, cuando un sobreviviente narró cómo el presidente municipal de Iguala mató al dirigente social.

El 3 de junio de 2013, el mismo día en que policías encontraron los tres cadáveres de dirigentes de la UP en la carretera México-Acapulco, puente Mezcala –punto que significa la división entre zona Centro y zona Norte, y a su vez las fronteras de los grupos de la delincuencia Los Rojos y Guerreros Unidos–, el PRD pidió en un comunicado que la PGR atrajera el caso. 

Jesús Zambrano, entonces líder nacional del PRD, exigió castigo, “tope donde tope y caiga quien caiga”.

El presidente de Iguala pidió licencia al Cabildo el 30 de septiembre de 2014, exactamente dos años después de asumir las funciones, envuelto en corrupción, crimen y narcotráfico. Actualmente se encuentra prófugo porque tuvo todo el espacio para huir después de la noche más violenta de Iguala.

 

 

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