Proceso electoral: anarquía y confusión

Zacarías Cervantes

La mañana del sábado 24 de abril, vecinas y vecinos de la colonia Ricardo Flores Magón, ubicada al oriente de Chilpancingo, se fueron juntando poco a poco, hasta formar un grupo compacto de entre veinte y veinticinco en la calle principal. La mayoría eran mujeres, provistas de sombrillas; los pocos hombres que llegaron, de sombrero o gorra, para protegerse del sol.

La cita para comenzar a concentrarse fue las nueve, de tal forma que a las nueve y media ya estaban todos los convocados, dispuestos a salir. En el semblante de la líder, al frente del grupo, se percibía la satisfacción del deber cumplido. Solo esperaban el servicio de transporte que iría por ellos para trasladarlos al centro de la ciudad. Su encomienda era «acompañar» en el arranque de campaña de una de las candidatas que buscan la presidencia municipal de Chilpancingo.

Entre los convocados había quienes en campañas anteriores han «acompañado» lo mismo a candidatos del PRI que del PRD. La consigna ahora fue apoyar a la del Morena.

Como ese grupo de la Flores Magón, bajaron otros de distintos puntos de la ciudad al centro de Chilpancingo, donde a las once de la mañana habían invadido la calle Emiliano Zapata y las aledañas al zócalo de la ciudad, donde se realizaría el mitin.

Ese sábado, en medio de diferencias internas por las disputas de las candidaturas, que dejaron débiles las estructuras de las dos principales fuerzas que se disputan el poder en Guerrero –por un lado la coalición PRI-PRD y por el otro Morena–, iniciaron campaña, casi simultáneamente, los candidatos a presidentes municipales de los ochenta municipios del estado (el de Ayutla se elige por usos y costumbres).

Ésta es la primera elección que se realiza con un gobierno federal distinto a los que han gobernado el país (PRI-PAN), que, además, promueve la transformación integral no solo del país, sino de la práctica democrática; es decir, la forma de hacer política y de elegir a las autoridades.

«Dejar que el pueblo decida libremente, porque en la democracia el pueblo manda», ha dicho el líder del movimiento de la Cuarta Transformación (4-T) y presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.

En la mayoría de los casos, las expectativas de triunfo, sin embargo, se vinieron abajo desde la designación de los candidatos no solo en los partidos de oposición, sino, en el mayor número de casos, en el partido que gobierna el país.

Fueron recurrentes las denuncias del uso de recursos públicos, económicos, humanos y materiales (en el caso del partido que gobierna el país) para la promoción de los aspirantes, la imposición de candidatos por los grupos más fuertes que dirigen los partidos y con vínculos y presencia en el ámbito nacional. El agandalle a ojos vistos.

De inicio, pareciera que nada cambió, ni en el partido que gobierna el país, mucho menos en los partidos de oposición.

Derivado de ello, previo al arranque de campaña, militantes de Morena exigieron a sus dirigencias nacional y estatal la reposición del proceso de la selección de sus candidatos en varios municipios, por el «desaseo» en la elección interna y las acusaron de «traicionar» los principios del partido y a la gente que luchó durante años para lograr el cambio en el país.

«Las candidaturas se ofertaron al mejor postor», acusó, por ejemplo, el diputado local Zeferino Gómez, quien aspiró a la presidencia municipal de Acapulco, en una conferencia de prensa el viernes 23, unas horas antes de que arrancaran las campañas.

Advirtió que si no se revisa el nombramiento de los candidatos, no van a apoyar, cuando menos en ese municipio, a la candidata del Morena, Abelina López Rodríguez. Dijo que no van a permitir que dirigentes «soberbios y arrogantes, nos vengan a faltar el respeto a los compañeros» y que no van a permitir que el Morena «se convierta en un partido lleno de chapulines y malandrines».

Acusó que la crisis por la que atraviesa Morena es responsabilidad del dirigente nacional, Mario Delgado; la secretaria general, Citlali Hernández Gómez; el dirigente estatal, Marcial Rodríguez Saldaña; el presidente del Consejo Estatal, Luis Enrique Ríos Saucedo, y la Comisión Nacional de Elecciones.

Convocó a los militantes del Morena en los diferentes municipios que «injustamente» han sido desplazados, a integrarse al movimiento en defensa de sus territorios, «y no permitan que infiltrados y sicarios políticos interrumpan la marcha de nuestro proyecto de nación, siempre pensando en apoyar a Andrés Manuel López Obrador».

Por su parte, la aspirante morenista a la alcaldía de Zihuatanejo Bernarda Leovigilda Chávez Hernández, denunció que hubo imposición de candidatos en todo Guerrero. «Y eso preocupa, porque no podemos dejar truncada la Cuarta Transformación, no podemos dejar solo a Andrés Manuel López Obrador».

Asimismo, el aspirante a la alcaldía de San Luis Acatlán, el abogado Javier Vázquez García, exigió la restitución de la candidatura en ese municipio, mientras que el aspirante a la diputación federal del distrito 2 de Chilpancingo Rodrigo Cortés Vivar, quien junto con un grupo de militantes tiene tomadas las oficinas de la dirección estatal del Morena, declaró que devolverán las oficinas cuando haya una mesa de diálogo con los dirigentes nacionales y estatales para revisar el proceso de la designación de candidatos en todo el estado.

Y el aspirante a la primera sindicatura de Acapulco Marco Antonio Adame dijo que muchos de los candidatos no representan el proyecto de nación, e incluso han estado en contra del presidente López Obrador.

«Mientras que los adversarios de enfrente ya están trabajando con todo, nosotros todavía nos mantenemos distraídos en este proceso», acusó.

También en Iguala, militantes y simpatizantes del Morena se declararon en contra de las «imposiciones» y «dedazos» en las candidaturas locales, advirtieron que aplicarán un «voto de castigo» a su partido y anunciaron que no apoyarán la reelección del alcalde Antonio Jaimes Herrera y del diputado local Antonio Helguera Jiménez. No descartaron apoyar a candidatos de otros partidos.

Pero en los partidos de enfrente, tampoco andan bien las cosas. En Chilpancingo, perredistas y priistas denunciaron que de última hora metió las manos el exgobernador Ángel Aguirre Rivero para dejar como candidato a la alcaldía a su «delfín» Alejandro Arcos Catalán.

En este municipio, la disputa estaba también entre el actual alcalde, Antonio Gaspar Beltrán, del PRD, que buscaba reelegirse, y Jorge Salgado Parra, del PRI.

Incluso, inicialmente se había registrado Gaspar Beltrán, y se daba por hecho que él abanderaría a la coalición PRI-PRD, pero de última hora fue retirado de la contienda, y por intervención de Aguirre Rivero se designó candidato a Arcos Catalán.

Horas después, Salgado Parra anunció una «tregua» en su actividad política. En una conferencia de prensa, acompañado por un grupo de sus seguidores, tres días antes de que iniciaran las campañas, declaró que le causó «decepción» que en la alianza PRI-PRD no se haya tomado en cuenta ni razonado los mejores y más adecuados perfiles para una competencia electoral que se anuncia compleja.

Con evidente tono de resentimiento, anunció que va a esperar mejores tiempos para dar paso a que las «ambiciones desmedidas tomen su curso». Reprochó que participó en la contienda interna en busca de la presidencia municipal porque nadie le dijo y siempre le negaron que hubiera habido un «acuerdo político» para que la capital del estado fuera encabezada por un partido distinto al suyo.

Dijo que hasta ahora le aseguran que él ya sabía de ese acuerdo. «Con la frente en alto les digo que yo no sabía, si lo hubiera sabido no tendría caso venir a perder», refutó.

En medio de estas diferencias que se repetían en la mayoría de los ochenta municipios, ya cerca de la medianoche del viernes 23 de abril, el pleno del Consejo General del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) avaló los registros de las planillas y listas de regidurías de los ayuntamientos presentadas en coaliciones y por partidos políticos, para el proceso electoral ordinario de gubernatura del estado, diputaciones locales y ayuntamientos 2020-2021.

Los consejeros aprobaron las candidaturas a ayuntamientos del PAN, PRI, PRD, PT, PVEM, MC, Morena, PES, Redes Sociales Progresistas, Fuerza por México, y por las coalición flexible del PT-PVEM, y la coalición flexible del PRI-PRD, que son los partidos y coaliciones que participan en esta contienda.

Las campañas iniciarían simultáneamente en las primeras horas del día siguiente, el sábado 24 de abril.

Ese día se comprobaría que el cambio es para que todo siga igual: discursos cargados de las mismas promesas de campañas de tiempos remotos, como el agua entubada para Chilpancingo; el acarreo de militantes y simpatizantes, como el de vecinos de la Ricardo Flores Magón y de decenas de colonias de la periferia de la ciudad; reparto de dádivas, enseres domésticos y prendas de vestir con las siglas de partidos y candidatos. Y hasta el tradicional chayote para los periodistas que acuden a cubrir los eventos de campaña.

Dos días antes del arranque de campaña, algunos reporteros de Chilpancingo recibieron la invitación para cubrir el mitin de una de las aspirantes a la presidencia municipal de la capital. Les prometieron que su asistencia sería gratificada con doscientos pesos, como en los viejos tiempos PRI.




Campañas. Desinterés público.
[Foto obtenida en la Internet]

Proceso electoral: candidatas frente a la violencia

Eduardo Yener Santos

En el proceso electoral en curso para elegir gobernador, diputados locales , diputados federales y presidentes municipales, en Guerrero destaca la violencia en que han quedado expuestas varias candidatas. Violencia física que puedan llegar a sufrir por parte de grupos delictivos, pero también la institucional que sus partidos políticos no buscan acuerdos para evitar acusaciones y descalificaciones entre las aspirantes mujeres.

En el arranque de las campañas políticas, hay al menos cuatro candidatas que realizan campaña proselitista en medio de violencia e inseguridad. Una de ellas fue privada de su libertad en Taxco, revelaron medios de comunicación, aunque su partido, el PRI, lo negó.

Para estas cuatro candidatas, dos de la Región Centro, una de la Norte y una más en la Tierra Caliente, no existe movimiento social que demande seguridad por ellas. Flor Añorve Ocampo va por segunda ocasión en busca de ocupar una curul en el Congreso.

Añorve Ocampo, candidata a diputada local por el distrito 21 con sede en Taxco, fue privada de la libertad por hombres armados la mañana del miércoles 21 de abril en la ciudad de Taxco.

Fuentes de la policía y militantes del PRI en Taxco informaron del hecho. Se indicó que el secuestro exprés ocurrió  alrededor de las once de la mañana cuando personas armadas interceptaron a la candidata en la zona de Los Arcos y minutos después, fue liberada.

La noticia en medios de comunicación circuló alrededor de la una tarde, tres horas después; es decir, a las cuatro de la tarde, Añorve Ocampo desmintió la noticia en sus redes sociales: «No he sido víctima de ningún agravio. Quiero hacer público, ya que existen diversos rumores en páginas de noticias de supuestos atentado hacia mi persona, respetando su trabajo periodístico y de manera oficial explico que no he sido víctima de ningún agravio hacia mi persona, me encuentro bien. A seguir trabajando».

En Taxco, militantes del PRI indicaron que Flor Añorve fue privada de su libertad por unos minutos y posteriormente, se refugió en un hotel de la ciudad donde acudió su equipo de campaña para trasladarla a su domicilio.

La aspirante priista ha sido acusada en mantas de apoyar a un grupo delictivo de aquella zona de Guerrero. Específicamente, el 28 de mayo de 2019, en la población de Acamixtla se localizaron cinco mantas donde la delincuencia acusó a varios políticos de Taxco de apoyar al grupo delictivo identificado como La familia michoacana.

Las otras tres candidatas en zonas de peligro son de Morena: Yamilet Arteaga Brito, candidata a la alcaldía de Apaxtla de Castrejón, en la Región Norte; Silvia Guillermo, candidata la diputación por el distrito local 24, con sede en Tixtla, Región Centro, y Diana Hernández, candidata por el distrito local 25, con sede en Chilapa.

Yamilet Arteaga, hace tres años fue testigo del desplazamientos de varias familias de comunidades de  Apaxtla, como Xochitepec y San Felipe, a causa de las disputas por el control de la zona mantenían grupos delictivos. Hasta la fecha, la mayoría de las familias no han regresado a sus comunidades.

La candidata a la presidencia municipal ha declarado que en su municipio ella y su partido se enfocaron en tener una planilla de unidad para evitar más conflictos.

A finales de 2019, la violencia incrementó en Apaxtla por la disputa del territorio de grupos delictivos y, ciudadanos de ese municipio se vieron en la necesidad de implementar un toque de queda para salvaguardarse.

En los distritos locales 24 y 25 de Guerrero que comprenden los municipios de Chilapa, Tixtla, Quechultenango, Apango, Mochitlán, José Joaquín de Herrera y Zitlala, zonas de mayor violencia e inseguridad, el partido Morena determinó que vayan dos mujeres a contender por las diputaciones.

La candidata de Morena en el distrito local 25, con cabecera en Chilapa, Diana Hernández, contenderá contra el priista Jesús Parra García, actual presidente de ese municipio que va como candidato de la alianza PRI-PRD.

En el distrito 24, con cabecera en Tixtla, la candidata es Silvia Guillermo, cuyo principal contrincante es Bernardo Ortega, diputado local perredista que busca relegirse por tres años más, como candidato de la alianza PRI-PRD.

Diana Hernández es hija del extinto dirigente social Ranferi Hernández, asesinado e incinerado dentro de su automovil en Chilapa, junto a su suegra, su esposa y su ahijado, en octubre de 2017, en vísperas de las elecciones de 2018. Según fuentes internas de Morena, Ranferi Hernández buscaba competir por la diputación federal 06, con cabecera en ese municipio, curul que a la postre ganó el PRD, con Raymundo García Gutiérrez.

En el distrito local 25 donde Morena compite con Diana Hernández, en el pasado proceso electoral asesinaron a tres mujeres, dos precandidatas y una excandidata. Se trata de Antonia Jaimes Moctezuma, del PRD, quien fue asesinada en su domicilio en febrero de 2018. Ella había buscado participar por la diputación local. Días después de ese mismo mes, fue asesinada Dulce María Rebaja Pedro, aspirante del PRI, quien también buscó la candidatura.

El 9 de agosto de 2019 fue asesinada la excandidata Bertha Silva Díaz, quien participó con la coalición Juntos Haremos Historia, integrada por Morena y Encuentro Social, en busca de la diputación local 25.

Actualmente, la diputada por el distrito local 25 es Alicia Elizabeth Zamora Villalva, del PRI, quien, además, ha sido presidenta municipal de Chilapa y diputada federal. Para estas elecciones, el PRI la apuntó en el quinto lugar de la lista de diputaciones plurinominales; es decir, podría reelegirse para un periodo más en el congreso local.

Alicia Zamora lleva veintiocho años ininterrumpidos ocupando cargos públicos y de elección popular, desde 1993, cuando fue directora del programa Solidaridad en Chilapa, luego, directora de desarrollo institucional del gobierno estatal y directora de Recursos Humanos hasta el 2002. Después llegó a la diputación local y de ahí saltó a la presidencia municipal de Chilapa, de 2005 a 2008.

Otro tipo de violencia, no preciosamente la física, en el que se ven inmersas las mujeres en este proceso eletoral, es el que se da en Morena en la dipsuta por la  candidatura a la presdiencia municipal de Chilpancingo.

En ese espacio, el Morena ha dejado que el conflicto interno se agrave entre la diputada local, Norma Otilia Hernández y la académica Silvia Alemán Mundo.

La maestra universitaria señaló que el comité estatal del Morena no transparentó el proceso interno para la candidatura a la presidencia municipal de Chilpancingo, y que el secretario Marcial Rodríguez impuso a Norma Otilia Hernández con quien negociaron que en la planilla se incluyera a la expriista, experredista y actual militante del PT, Yasmín Arriaga Torres, esposa del actual presidente municipal, Antonio Gaspar.

Alemán también acusa que Norma Otilia Hernández, durante sus tres años de legisladora, mantuvo una campaña proselitista, con la entrega de dadivas en comunidades de Chilpancingo y la colocación de espectaculares con su imagen en diversos puntos de la capital, lo que, dijo, es violatorio a los estatus de Morena.

Silvia Alemán, quien en la pasada elección fue candidata del Morena a la presidencia municipal de la capital, ha emprendido una campaña de descalificaciones y acusaciones contra Otilia Hernández en medios de comunicación y en calles de Chilpancingo, a través de marchas, asegurando que su compañera de partido no es candidata legítima.

También acusa que el dirigente partidista Marcial Rodríguez no ha dado la cara a los inconformes para explicarles del proceso interno o en su defecto llamarlos a sumarse a la campaña.




Diana Hernández. Correr el riesgo.
[Foto: Yener Santos]

Campañas. Desinterés público.

Del 26 de abril al 2 de mayo de 2021 al

#1052

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