La mañana lluviosa del domingo 14 de junio, siete días después de las elecciones, doña María de Jesús Cisneros Martínez y Celia Piedra, esposa del desaparecido en la década de los setenta Jacobo Nájera Hernández, se encontraban sentadas en el Instituto Electoral de Participación Ciudadana del Estado de Guerrero (IEPC).
La voz de uno de los funcionarios del órgano electoral hizo reaccionar a María de Jesús, quien se veía somnolienta.
La orden del día del IPEC contemplaba la entrega de constancias de los diputados de representación proporcional. Por eso estaba allí doña María de Jesús, una mujer a la que le cambió la vida el 23 de mayo de 2007 cuando desaparecieron a su hijo en Chilpancingo.
Del activismo al lado de los dirigentes de la organización del Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco) para luchar por encontrar a su hijo, pasó, casi sin querer, a la política.
Y ahora es diputada local, sin que ella lo buscara.
Aunque cuando tenía su esposo, lo acompañaba a las actividades políticas del desaparecido Partido Revolucionario de los Trabajadores(PRT).
Posteriormente, algunas veces, participó en las marchas del PRD por los conflictos poselectorales.
En la lista de candidatos a diputados plurinominales de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), María de Jesús fue registrada en el primer lugar. Ganó ese sitio a través de una tómbola.
Cuando se llevó a cabo esta insaculación en un restaurante del hotel Paradisse, ella estaba presente. Pero, dijo no quería inscribirse.
“Las compañeras me animaron, y me dije: ‘pues no hay problema, de todos modos no creo que yo salga en alguno de los lugares de la lista’”, recuerda.
Pero dice que más se “sacó de onda” cuando escuchó que el primer papelito que extrajeron de la tómbola estaba escrito su nombre. Le dio nerviosismo y miedo.
“Yo todavía les dije a mis compañeros que mejor me excluyeran porque ya todos me felicitaban debido a había la seguridad de que sería diputada”, comenta.
“¡Ay, Dios mío! Pero yo qué haré, les contesté asustada”, cita.
Doña María de Jesús, quien desde antes que desapareciera su hijo, hace ocho años y que recibió su constancia de mayoría que la acredita como diputada electa, confiesa: “Todavía sigo asustada”.
En septiembre, dentro de dos meses y días, María de Jesús tomará protesta como integrante de la 60 Legislatura local, cuya conformación política cambiará ya que la mayoría la tendrá el PRI y no el PRD que la tuvo durante las últimas tres legislaturas.
Ya un poco repuesta de la emoción de la entrega de su constancia, doña María de Jesús, cuenta que ella es originaria del municipio de San Miguel Totolapan, pero que se vino muy chica a Chilpancingo para estudiar.
“Yo me metí a los cursos de verano que daban en la Universidad Autónoma de Guerrero y aquí conocí a mi expareja”, evoca.
Prefiere no hablar de su vida sentimental, y sólo dice que ella, a costa de trabajo, formó a sus hijos.
“Yo vendía cena en las noches y a veces oro que iba a comprar a Iguala; además, en un tiempo puse una tienda que a veces la atendían mis hijos mientras yo me iba a trabajar”, cuenta.
La mujer hace una pausa cuando habla de sus hijos.
Baja la cabeza, como que quiere soltar en llanto.
El recuerdo de su hijo desaparecido, Ludwing Hernández, la obliga a retomar la plática.
Indica que una vez que esté en el Congreso, su exigencia para presentación con vida de todos los desaparecidos en Guerrero, no será una voz en el desierto.
Dice que ya como legisladora tratará de presidir la Comisión de Derechos Humanos.
Ella cree que en esa posición se le va a facilitar dar la lucha para proponer que el Congreso exija a las autoridades federales y estatales la búsqueda y presentación con vida de cientos de desaparecidos en Guerrero.
“La verdad me siento muy rara, ya que no sé que haré una vez que asuma el cargo, porque no tengo experiencia. Pero lo que sí tengo claro es de que en el Congreso seré una voz de las familias que tienen un ser querido desaparecido”, anticipa.
La mujer que en la década de los ochenta, junto con su pareja sentimental participó en las tareas políticas del desaparecido Partido Revolucionario de los Trabajadores(PRT) y después en las movilizaciones poselectorales del PRD, dice que esto de ser legisladora no se lo esperaba.
Dice que ella nunca militó en el PRD ni en el PRT y que si participaba en las protestas era porque ella consideraba que estos partidos eran de izquierda y que luchaban por causas justas.
Pero que desde hace años dejó de confiar en el PRD, y que ahora es fiel admiradora del el dos veces ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, fundador de Morena.
“Pero mi principal bandera no es la política, es buscar y encontrar a mi hijo y por supuesto a todos los que están desaparecidos”, ofrece.
Considera que en México, y principalmente Guerrero, se están viviendo tiempos de horror por la violencia e inseguridad.
Y no duda en que de toda esta ola de asesinatos, desapariciones forzadas como la de los 43 normalistas de Ayotzinapa, tiene la culpa el gobierno.
“El gobierno, aparte de que está coludido con la delincuencia y los cárteles de la droga, es el responsable de situación de pobreza y marginación en que viven la mayoría de los mexicanos”, critica.
Durante la entrevista, Doña Chuy, como le dice la mayoría de la gente, dice con tristeza que todo esto lo cambiaría por encontrar vivo a su hijo Ludwing. La última vez que lo vio fue a mediodía del 23 del mayo del 2007 cuando le dijo que iría a un taller mecánico para que le repararan su Volkswagen.
En la próxima 60 Legislatura local, la diputada de Morena, María de Jesús Cisneros, convivirá con políticos tanto del PRI y de la oposición que están envueltos en la polémica.
Por el lado del PRI, estará Cuauhtémoc Salgado, quien se perfila como presidente de la Comisión de Gobierno; Ricardo Moreno, hermano del alcalde de esta capital, Mario Moreno, ambos acusados por el empresario Pioquinto Damián de estar vinculados con la delincuencia organizada.
El expriísta Héctor Vicario Castrejón, ahora por el Partido Verde Ecologista de México, poderoso subsecretario de finanzas durante el gobierno del defenestrado Rubén Figueroa Alcocer, acusado por organizaciones sociales y de los familiares de los 17 campesinos asesinados en el vado de Aguas Blancas, de haber sido copartícipe de esa matanza.
El perredista, Sebastián de la Rosa, representante en Guerrero de Nueva izquierda, de Los Chuchos, se perfila como jefe de la bancada del PRD en la Legislatura. Acusado de haber protegido al exalcalde de Iguala José Luis Abarca, de la Rosa ha escalado cargos dentro del PRD gracias a sus relaciones con Los Chuchos.
Mauricio Legarreta, quien no es de Guerrero, también formara parte de la bancada del PVEM. El legislador del Verde, es hermano de la conductora de la empresa Televisa, Andrea Legarreta. Ésta, actores y actrices, así como el director técnico de la Selección Mexicana de futbol, Miguel, El Piojo, Herrera, portaron una prenda de color verde durante la elección del 7 de junio.
Los actores de Televisa y el entrenador del Tri fueron acusados ante el INE de haber realizado actos de propaganda por el PVEM.